Reseña del libro: El guardián de las tormentas, de Catherine Doyle
SINOPSIS
Cuando Fionn Boyle llega a Arranmore, la isla empieza a temblar bajo sus pies.
Una vez por generación, la isla de Arranmore elige a un nuevo Guardián de las Tormentas, alguien con el poder de controlar la magia de la isla y protegerla de sus enemigos.
Ha llegado el momento de que el abuelo de Fionn, un anciano reservado y excéntrico, dé un paso a un lado para que el chico se alce como nuevo Guardián. Pero en lo más profundo de la isla, alguien ha estado esperando a Fionn.
Alguien que aprovechará la batalla para convertirse en el próximo protector de la isla, para despertar así una magia siniestra y reavivar una guerra inmemorial...
OPINIÓN
Los hermanos la mayoría de las veces se pelean y culpan de diferentes cosas, ocultan secretos y dicen cosas que llegan a herir al otro pero nada de esto significa que no se quieran y sepan disculparse. "El guardián de las tormentas" es un libro que deja a la vista todo esto y permite al lector adentrarse en la vida de dos hermanos que perdieron a su padre a muy corta edad y tienen una madre que se encuentra enferma.
Por ello, como su madre necesita un descanso y tiempo para mejorar, Fionn es enviado junto a su hermana, Tara, a la isla de Arranmore. Allí se quedarán en casa de su abuelo, con el que no tienen casi relación por distintas circunstancias pero intentarán que la convivencia entre los tres sea buena o, al menos, llevadera.
Tara ya había tenido la oportunidad de visitar la isla anteriormente, por lo que la conoce bastante bien y sabe lo que ocurre o al menos tiene una idea bastante aproximada. Ella estuvo evitando hablar con su hermano al respecto y cuando ambos se presentan en la isla parece que ella pretende seguir manteniendo a su hermano en la ignorancia y lo deja de lado. El abuelo no suele hablar mucho de lo que sabe y es, vive enfrascado en crear velas y parece que envejece a pasos agigantados.
Resulta que la isla de Arranmore guarda mucha magia y secretos. Fionn comenzará a descubrirlos poco a poco y solo. Él entiende que su hermana le oculta lo que sabe y se molesta con ella no solo por esto sino que también por dejarlo siempre de lado, viéndolo como alguien incapaz o inferior, como si aún fuera un niño pequeño, por evitar hablar con él antes y ahora, por asociarse con quien no debe y por muchas otras cosas. Esto hace que Fionn se aleje un poco de su hermana y comience a acercarse más a su abuelo, quien de alguna manera lo ayudará a conocer lo que ocurre y a que pueda descubrir quién es.
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Esta historia me pareció encantadora y estuve enganchada a ella de principio a fin. El drama entre los hermanos y su historia de vida (que en realidad no se profundiza mucho pero creo que lo que se nos permite conocer da una idea general), el abuelo tan peculiar, la isla de Arranmore, los secretos y la magia que allí hay..., todo resulta atrapante. Además, me pareció que la historia estuvo muy bien ambientada y que incluso la isla pasó a ser un personaje más.
Sin embargo, creo que lo que más destaco de esta historia es la relación entre Fionn y su abuelo. Una relación que comenzó un poco distante entre ambos pero en el transcurso de la historia ambos personajes se fueron acercando de a poco, desarrollándose así una bonita relación en la que estuvieron presentes alegrías, tristezas, confesiones, desacuerdos, acuerdos, sentimientos encontrados y muchísimo amor.
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