Reseña del libro: El legado de Danielle Steel
La historia gira en torno a Brigitte, una mujer que lleva una vida cómoda, sin aventuras ni grandes sobresaltos. La realidad es que a ella no le gusta atreverse a cosas nuevas, prefiere seguir en su zona de confort, lo que le juega demasiado en contra.
En menos de una semana, la vida de Brigitte cambia por completo: se queda sin novio, sin trabajo y todo ello le hace perder las ganas de seguir escribiendo su libro sobre el voto de la mujer. En ese momento se da cuenta de que su vida, en realidad, estaba en un punto muerto debido a su poca valentía a la hora de asumir riesgos. Podría haber hablado con su novio para dejar las cosas claras y saber exactamente qué quería cada uno para la relación, si era un compromiso real y duradero, lo que querían para el futuro de ambos o si, en cambio, era algo pasajero y seguían juntos por costumbre hasta que alguno decidiese ir por su lado. Podría haber asumido el riesgo de ascender en su puesto de trabajo. Podría haber hecho las cosas de manera diferente pero se estancó y perdió años de su vida.
Al ver que su futuro es incierto, se traslada con su madre a Nueva York durante unos días. Ahora que Brigitte tiene su vida detenida y no sabe qué hacer para distraerse, decide ayudar a su madre, una mujer que lleva una vida activa y placentera, en la reconstrucción del árbol genealógico. En la búsqueda de antepasados faltantes, Brig descubre que es descendiente de una india sioux, llamada Wachiwi, una joven que viajó a Francia y se convirtió en marquesa. Todo esto despierta el interés de la protagonista, quien irá a París para recopilar más información de su antepasada y descubrir cómo llegó a Francia.
Es allí que, con su francés algo oxidado, Brig desespera al no poder hacerse entender y por poco se da por vencida pero conoce a Marc, un escritor y profesor, que la ayudará en la búsqueda y le brindará la oportunidad de comenzar una nueva vida.
La historia de Wachiwi empieza a conocerse tras el descubrimiento de Brigitte. Wachiwi es una india sioux, joven y hermosa, adorada tanto por sus hermanos como por su padre quien es jefe de su tribu. Un día otra tribu los ataca llevándose a la princesa sioux y otras mujeres más, dejando atrás a varios hombres muertos. Así, se ve obligada a vivir en una nueva tribu y, aunque intenta escapar varias veces durante los primeros días no lo consigue. Sabe que está muy alejada de su tribu y su familia, y que probablemente nunca volverá a verlos pero sigue empecinada en regresar, aunque de a poco va disminuyendo sus intentos de huida para que crean que se rindió. Un día, en uno de sus largos paseos, conoce a un francés, con el que trata de comunicarse por mimica y, posteriormente, escapan.
Junto a Jean aprende pocas frases y palabras en francés. Enamorados cruzan el Atlántico rumbo a Francia pero la suerte no estuvo de su lado y Wachiwi llegó sola, triste y hablando muy poco el idioma.
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Wachiwi y su vida me atraparon por completo. Todo lo que le ocurrió, lo que la llevó a Francia, cómo logró convertirse en marquesa y ser respetada en la corte de Luis XIV. El hecho de que lo perdió todo y, sin embargo, siguió adelante, empezando una vida desde cero en un lugar desconocido. Era una joven muy valiente y fuerte. Un personaje femenino increíble.
Es un libro que resulta ligero, fácil de leer, que atrapa y que hace enfásis en las segundas oportunidades, el destino y el amor.
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